Familiares de la joven que se quitó la vida aseguran que se había ido de la comisaría “muerta de miedo”. La Justicia no ordenó una autopsia y hubo incidentes frente al domicilio del acusado y en la comisaría. Ocurrió en Tucumán.
Una joven quiso denunciar a su pareja por violencia de género pero los efectivos de la comisaría a la que se dirigió no quisieron tomarle la denuncia porque “no estaba el oficial de turno”. Tras la negativa, la mujer regresó a su casa “muerta de miedo” y se suicidó.
El hecho ocurrió este domingo en la localidad tucumana de Trancas. Una vez que se conoció la noticia, hubo disturbios en la municipalidad, la seccional involucrada y la casa de la familia del acusado.
“No entiendo por qué no hicieron nada. Ella fue a pedir ayuda a la comisaría de Trancas, pero no la escucharon. La corrieron. Desesperada y angustiada volvió a su casa y se ahorcó. No hay derecho a que hicieran eso”, dijo entre lágrimas Ernesto Campos, cuñado de la mujer, a los medios locales.
Noelia Soledad Sosa tenía 30 años, trabajaba en una estación de servicio y era madre de dos chicos. “Ella me dijo que estaba muy mal porque su pareja la había atacado. Contó que la tomó del cabello, la arrastró por la casa y que luego le destrozó el celular”, relató Campos.
Además, dio detalles de porqué en la comisaría no quisieron tomarle la denuncia. “Le dijeron que como no estaba el oficial de guardia, no podían hacer nada. Que regresara a la tarde que seguro lo encontraría”, precisó. Sin embargo, la mujer les suplicó por ayuda ya que su pareja estaba en la puerta del lugar esperando a que ella saliera: “Les dijo a los uniformados que ella no podía salir de ahí porque tenía miedo de que le hiciera algo malo”, detalló.
Como no hubo cambios en la postura de los agentes, la mujer volvió a su casa. “Estaba muy mal. La noté como rendida, que no había nada que pudiera hacer”, agregó su cuñado. “Él es un productor importante en la zona. Estaban de novios y ella se quedaba varias veces en su casa. Creo que ella nunca lo denunció porque lo amaba y aguantaba todo”, remarcó.
Además, contó que las amigas de Noelia le dijeron que él le daba pastillas para dormir o la encerraba en el baño para que no pudiera salir.
Hubo escraches en la casa de la pareja de Sosa. (Foto: gentileza Primera Fuente)
Dudas respecto a la muerte de la joven
“Nos avisaron de su muerte y fuimos corriendo hasta ahí. Estuvimos horas esperando y cuando llegaron los de criminalística, estuvieron cinco minutos y nos entregaron el cuerpo”, describió el hombre.
También aseguró que, en los últimos días, Sosa le había contado a su familia que había tenido una discusión con su pareja y que en ese momento ella había alcanzado a rasguñarle los brazos. Ante esta situación, le pidieron a la Policía que lo revisaran, pero en la seccional se negaron. “Encima ahí nos enteramos que él la había denunciado porque, según dijo, ella no estaba bien mentalmente y no lo dejaba vivir en paz”, explicó.
Noelia tenía 30 años y era madre de dos chicos. (Foto: Twitter/@marianar31)
Los familiares de la joven denunciaron que la Policía no actúa como corresponde en casos de violencia de género. “Cada vez que va una mujer a realizar una denuncia de estas características recibe las respuestas de que no está el oficial de turno. Eso ya no se puede tolerar más”, dijo Ricardo Scheuermann, abogado de la familia.
Asimismo, pidió la intervención del ministro (Eugenio) Agüero Gamboa. “Es cierto que en el organigrama de la fuerza existe la norma que indica que las denuncias solo pueden ser tomadas por oficiales, pero entonces que pongan más oficiales para que no haya más problemas de estas características”, agregó.
“La desprotegieron porque no le dieron ninguna respuesta, a pesar de que el denunciado estaba en la puerta de la comisaría. Se fue del lugar muerta de miedo”, indicó. “Tampoco entendemos por qué no se ordenó una autopsia. Es muy probable que se haya suicidado, pero también existe la posibilidad de que la hayan colgado”, advirtió.
Marcha y furia
El lunes por la noche, los allegados de la joven marcharon por las calles de Trancas, escracharon la casa del productor y rechazaron la presencia policial, según informó Contexto Tucumán. También hubo protestas frente a la municipalidad y la comisaría.
“Se han tomado todas las medidas administrativas de rigor para determinar la responsabilidad del personal de la comisaría de Trancas”, explicó el jefe de la Unidad Regional Norte Joaquín Girveaux. “Nuestros hombres saben cómo deben actuar, permanentemente se les está instruyendo sobre esta cuestión. Por ese motivo, si es que se llega a encontrar alguna irregularidad, se actuará con rigor”, sostuvo el funcionario. publicó El Once.