Vencen 64 millones en febrero y 62 en agosto
La provincia de Entre Ríos enfrenta un desafío financiero significativo con vencimientos de deuda en dólares que preocupan al gobernador Rogelio Frigerio. Se espera que la provincia cancele un pago de su bono externo en febrero, ascendente a 64 millones de dólares, y otro de 62 millones en agosto. Ante esta situación, Frigerio se ve obligado a considerar opciones como un nuevo endeudamiento o una reestructuración de la deuda.
El primer vencimiento anual del bono en dólares lanzado en 2017 está programado para el 8 de febrero, sumando capital e intereses. Aunque el exgobernador Gustavo Bordet afirmó que dejó en caja 47 millones de dólares, la diferencia de 17 millones no parece suficiente para cubrir el compromiso.
La crisis financiera se profundiza con la necesidad de la administración de Frigerio de endeudarse en 30 mil millones de pesos para pagar los salarios de maestros, enfermeros, médicos, policías y empleados estatales en enero.
En su discurso de asunción, Frigerio advirtió sobre la falta de recursos y la necesidad de enfrentar la crisis económica. La suba del dólar oficial a 820 pesos agravó la situación, llevando a la provincia a comprometer un 55% de su masa impositiva para obtener los billetes verdes.
Frigerio se enfrenta a dos alternativas. La primera, a corto plazo, implica recurrir al saldo de endeudamiento autorizado por la Legislatura en el presupuesto 2024 para comprar dólares y cumplir con el compromiso. La segunda opción, que surgirá con el vencimiento de agosto por 62 millones, es la reestructuración de la deuda a través de negociaciones con los tenedores de bonos.
La deuda en dólares, lanzada en 2017 y con vencimiento en 2025, fue renegociada durante la pandemia, forzando a Entre Ríos a aceptar condiciones y aplazar la mayoría de los vencimientos a partir de 2024.
Este desafío financiero heredado por Frigerio se presenta como una «bomba» que Bordet dejó en la provincia, según su entorno. Con pagos acumulados por 360 millones de dólares entre 2024 y 2027 y una tasa que aumentará al 8,25%, la deuda en dólares plantea un obstáculo significativo para la gestión actual.
Frigerio buscará reuniones de alto nivel con autoridades nacionales en las próximas semanas para abordar esta compleja situación financiera.