La detención de Alcides Camejo, secretario general del Sindicato de la Fruta, por tenencia ilegal de armas de fuego, su vinculación con la muerte de un sereno en su propiedad y su imputación en una causa por enriquecimiento ilícito han generado una profunda crisis en la entidad gremial. Ante esta situación, trabajadores del sector exigen la designación de un agente normalizador que garantice el funcionamiento del sindicato y proteja sus derechos.
Reclamo de intervención
Antonio “Tonino” Leyes y Leandro Ragone, representantes de un grupo de trabajadores, dialogaron con un cronista de 7Paginas y explicaron que ya han iniciado gestiones para solicitar la intervención del gobierno provincial y la justicia. El objetivo es que se designe un agente normalizador que asuma el control del sindicato hasta que la situación institucional se regularice.
“Hoy nuestro gremio está a la deriva, y es sumamente necesario que las autoridades intervengan para garantizar nuestros derechos. Por eso pedimos que asuma un agente normalizador”, sostuvo Ragone.
Denuncias contra la gestión de Camejo
Cabe recordar que Leyes y Ragone fueron parte de los trabajadores que en su momento denunciaron a la comisión directiva del sindicato por presunto vaciamiento de la obra social, elecciones fraudulentas y manejos irregulares en la entidad gremial. Estas denuncias derivaron en una investigación judicial que culminó con la imputación de Camejo y otras nueve personas por malversación de fondos y enriquecimiento ilícito.
“Camejo nunca nos representó, y ahora es el momento de normalizar esta situación que hace años venimos denunciando. Los trabajadores necesitamos un sindicato que realmente nos defienda”, afirmó Leyes.
Un sindicato en crisis
La situación del Sindicato de la Fruta refleja una crisis de representación y confianza entre los trabajadores y sus dirigentes. Según sus detractores, Camejo y su gestión no han defendido los intereses de los trabajadores y han incurrido en prácticas que han dejado a la entidad al borde del colapso.
La intervención por parte de un agente normalizador, aseguran, es la única salida viable para restablecer la confianza y garantizar la transparencia en el manejo del gremio. La solicitud ya ha sido elevada y los trabajadores esperan una pronta respuesta por parte de las autoridades competentes.
Mientras tanto, la detención de Camejo y las acusaciones en su contra marcan un punto de inflexión en la historia del Sindicato de la Fruta, cuya recuperación dependerá de las acciones que se tomen en los próximos días.
Redaccion de 7Paginas